Y la magia continuó, desde la aparición de Nadine,
la Hija de las Estrellas que salió a la venta, en forma independiente y
sin el respaldo de una casa editorial, con un tiraje de 5 mil ejemplares. Poco
antes de su presentación ante los medios de difusión (con Daniela Romo, claro, como
presentadora y madrina), apareció la amiga de una amiga que se dedica a manejar
patrocinios con marcas importantes. Por medio de ela, surgió una propuesta: una
conocida empresa bancaria, solicitó una edición especial del libro, como regalo
de Navidad para clientes VIP y empleados. Y lo mejor: querían ¡65 mil ejemplares! O sea que, antes de
su aparición en tiendas y librerías, ¡Nadine estaba por vender casi la mitad de
lo que había vendido el libro La Gloria Por el Infierno (también
de mi autoría), que en ese entonces ya andaba por los 150 mil ejemplares
vendidos, en seis años, encabezando la lista de los diez best sellers (en el
género de libros de farándula), pero respaldado por un gran escándalo (en ese
entonces, en su apogeo) y una casa editorial transnacional. Y Nadine, solita,
sin casa editorial ni escándalo, estaba por vender 65 mil ejemplares ¡antes de
su salida! Eso sí, con algunos cambios en la portada del libro: algún motivo
navideño y el logotipo de la empresa, tal como lo solicitaron.
Sin
embargo, el sueño se esfumó poco a poco. La empresa bancaria, primero, quería
que se le entregaran los 65 libros el 15 de diciembre de 2004, a pesar de que
aún no se había firmado el contrato correspondiente ni nos habían entegado el
50% de adelanto. Total, que, el tiraje no se llevó a cabo. Luego, decidieron
que, mejor, utilizarían el libro como obsequio, para una promoción en el Día
del Niño. Y, finalmente, todo quedó en el aire. Ni Navidad ni Día del Niño.
Pero
como dice Nadine: “todo es siempre por algo y las cosas llegan en su justo momento, ni
antes ni después”. O lo que es lo mismo: no existen las casualidades,
sino las causalidades. Ley de Causa y Efecto. A mediados de 2005, surgió
una nueva posibilidad con una empesa telefónica, ubicada en Chicago y
especializada en tarifas económicas para latinos, residentes en Estados Unidos.
Una empresa (o más bien, una agencia de publicidad que manejaba su cuenta) con
la que años atrás yo había trabajado, produciéndoles fotonovelas (con un tiraje
de un millón de ejemplares), en las que, en medio de una historia de amor, se
promovían los servicios de la telefónica. Ejemplares que se regalaban en
supermercados de varias zonas latinas en Estados Unidos: California, Florida,
Nueva York, Chicago…
Diez
años después de la útima fotonovela que les produje, me buscaron para realizar
una nueva, con el objetivo de promover su nueva línea de telefonía celular,
¡precisamente en la época navideña! Querían a Bárbara Mori, como
protagonista de la fotonovela. Yo pensé rápido y antes de proponerle la
fotonovela al representante de la Mori (seguro de que ella no la aceptaría y,
en caso de hacerlo, cobraría una millonada, fuera del presupuesto que a mí me
marcaban), se me ocurrió que, en vez de fotonovela, utilizaran el libro de Nadine,
la Hija de las Estrellas. Envié un ejemplar a Chicago y una propuesta,
incluyendo una portada con motivos navideños (que ya estaba diseñada) y el logo
de la empresa telefónica.
Les
gustó la idea, pero claro, imprimir un libro de 315 páginas, resultaba más caro
que imprimir una fotonovela de 36 páginas. Entonces, empezó la negociación, el
estira y afloja. De entrada, decidieron que el tiraje no sería de un millón de
ejemplares, sino, sólo de… ¡60 mil! Cinco mil menos del que
quería la empresa bancaria.
Finalmente,
se llegó a un acuerdo y el libro se les cobró casi al costo, sin ninguna
ganancia. ¡Y se imprimió! No fueron 65 mil libros los que se vendieron al
precio de venta ($129 pesos), pero sí ¡60 mil que entraron a Estados Unidos!
Entonces
sí, en menos de un año desde su lanzamiento, ¡Nadine ya había vendido 65 mil
ejemplares que más los 5 mil del tiraje inicial, distribuido sólo en México, y
otros 5 mil sue se imprimieron después, daban un total de ¡75 mil ejemplares!
que, sumados a un tiraje más de 5 mil que me dediqué a vender en escuelas,
donde impusieron a Nadine, la Hija de las Estrellas, como libro de texto
obligatorio, para sexto de primaria y primero y segundo de secundaria… en año y
medio, ¡Nadine vendió 80 mil ejemplares!
Esto,
mientras fueron dándose, uno a uno, más mensajes mágicos y la aparición de
Nadine en otros países de América Latina, España y hasta Inglaterra. Libros que
llegaron ahí, al principio en forma inexplicable, porque la distribuidora, sólo
se concentró en territorio mexicano. Nadine empezó a viajar, sin pedirme
permiso, y hasta comenzó a aparecer en diarios de otros países, como El País,
uno de los más importantes en España. Más que nunca, supe que “la magia existe”
y se propaga hasta donde menos imaginas. Pero eso… es otra historia.